Publicado: 26/11/2014 04:00
Primero se decidió eliminar los despachos en la nueva ciudad financiera de BBVA. Ahora, la entidad presidida por Francisco González ha decidido suprimir los galones a sus directivos. Desde este miércoles, el banco azul ha eliminado las denominaciones 'directivas internas'. Así, los antiguos directores corporativos o directores de los diferentes departamentos de la entidad pierden esa etiqueta para convertirse en personal del respectivo departamento al que corresponde. Sin embargo, mantienen el rango y sueldo. La medida, que afecta a poco más de 2.000 altos cargos, se comunicó internamente durante la tarde del martes a los afectados a través de un vídeo corporativo, según ha podido saber Vozpópuli.
Ángel Cano desgranó los motivos de esta decisión en el citado vídeo. El CEO explicó que la medida se encuadra dentro de la transformación cultural que está viviendo la entidad, y de las nuevas formas de trabajar, que pretende avanzar hacia esquemas más flexibles, más ágiles, más colaborativos y que favorezcan la toma de decisiones.
La entidad pretende lograr una mayor flexibilidad en la gestión de los equipos y suprimir los símbolos externos
La entidad pretende, según explica su CEO en el vídeo, lograr una mayor flexibilidad en la gestión de los equipos y suprimir los símbolos externos vinculados a la mera pertenencia a determinados colectivos. Con esta decisión, se elimina la diferenciación que hasta ahora existía entre los directores corporativos, en el entorno de 300 trabajadores, y los directores, poco más de 1.700 empleados. Fuentes de la entidad confirman esta decisión ante la llamada de este medio preguntando por el contenido del vídeo corporativo.
Esta evolución se enmarca dentro de las nuevas formas de trabajo que ya se están implantando, según explica Cano, y otro paso más en la identificación y gestión del talento de la plantilla de BBVA. Forma parte de las nuevas formas de trabajo sin despachos que se ha trasladado en la construcción de la nueva ciudad financiera del banco en Las Tablas y de la transformación digital que está viviendo la entidad.
El proyecto de Herzog y de Meuron está basado en grandes espacios abiertos interiores que huye de los despachos. En la nueva sede, la cultura de los despachos y las puertas cerradas desaparece. No habrá secretos. Todos a cara descubierta, interactuando más y compartiendo información y trabajo. De hecho, el diseño contempla un único despacho en todo el recinto: el que contará Francisco González en el edificio de conocido como la 'Vela', como adelantó este medio en mayo de 2013.
Esta medida provocó un intenso movimiento interno entre los afectados. Una respuesta similar se prevé ahora con la eliminación de las etiquetas internas de directivos, según explican fuentes no oficiales de la entidad.
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