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Del Bosque, de la presión de los grandes de la Liga a los de la Premier

Si Del Bosque no tenía bastante con la presión de Barça y Madrid cada vez que hace una convocatoria para La Roja, al seleccionador español le empiezan a presionar también los grandes de la Premier. Tal y como adelantó Radio Marca, el técnico del Manchester City, Roberto Mancini, pidió al salmantino que no convocara a Silva, ya que el canario acumula muchos partidos, y otro italiano, Roberto Di Matteo, ha lanzado un aviso de lo sobrecargado que está Fernando Torres en el Chelsea.

Mancini envió una carta al seleccionador español solicitándole que diera descanso a Silva, petición que, teniendo en cuenta lo mucho que se juega España en estos dos partidos -ante Bielorrusia en Minsk y ante Francia en el Calderón-, Del Bosque ha rechazado. Por su parte, Di Matteo pregonó su preocupación por el hecho de que Torres, titular indiscutible este año con los blues, pueda llegar a sufrir una sobrecarga de partidos. El Niño, que lleva cinco goles esta temporada, se ha convertido en la máxima referencia en el ataque del Chelsea tras la marcha a China del marfileño Didier Drogba.

Mientras Silva ya fue la temporada pasada el jugador más deciviso del City, el exdelantero del Atlético ha sido titular en los once partidos oficiales que han disputado los londinenses desde que abrieron la temporada el 12 de agosto con la final de la 'Community Shield', que perdieron contra el Manchester City (2-3). "Es nuestro séptimo encuentro en 21 días. Sus condiciones físicas son muy buenas pero, sin duda, es algo que hay que tener en cuenta", señaló Di Matteo en rueda de prensa al ser cuestionado por la posibilidad de que Torres acuse el cansancio en este inicio de temporada.

El Niño, que la pasada temporada recibió críticas por su crisis goleadora, es esta campaña la pieza principal del ataque blue junto a otro español, Juan Mata, a quien en cambio Del Bosque no ha convocado. En los primeros dos meses de la temporada, los números de Torres muestran que ha comenzado a superar su sequía de cara a puerta: sus cinco goles de esta temporada contrastan con los doce tantos que había marcado desde enero de 2011, cuando llegó a Londres procedente del Liverpool por un traspaso de 58,8 millones de euros.

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