Publicado: 21/01/2015 22:03
Atlético y Barcelona decidirán la eliminatoria en el partido de vuelta del Vicente Calderón, pero el Barcelona lleva un magnífico botín al Manzanares, más que por el gol de penalti de Messi por el hecho de no haber recibido un gol. Difícilmente el Barça se marcha de los partidos sin marcar, y eso obligaria a los rojiblancos a anotar tres goles en la vuelta.
La noche era fría en el Camp Nou para vivir el partido de ida de los cuartos de final de Copa con 65.000 persona en las gradas. Simeone advirtió que la clave sería saber atacar al Barcelona y para ello sacó en el once jugadores de corte ofensivo como Arda, Koke, Griezmann y Torres. En el Barcelona, Luis Enrique apostó por el equipo que va consolidándose como titular, con la excepción de Ter Stegen por Bravo.
Neymar abrió las hostilidades con un disparo con rosca desde la izquierda que Oblak despejó a córner. El balón era azulgrana en las inmediaciones del área atlética. El Barcelona estaba enchufado y Messi demostraba su hambre. Un disparo del argentino, tras una triangulación con Alves y Rakitic, salió por encima de la meta de Oblak. El Atlético sufría, no le duraba el balón en los pies.
Con el paso de los minutos, el Atlético comienzó a estirarse, así, pasada la media hora, justo cuando Messi se tomaba un descanso. Griezmann remató alto. En la siguiente jugada Luis Suárez desperdició la ocasión más clara de la primera mita, al enviar alto un balón llovido del cielo. El empate a cero refleja lo que ha ocurrido en la primera mitad.
En la ducha se quedó Torres, lento y desacertado esta vez, saliendo Mandzukic por el de Fuenlabrada. Luis Enrique quedó satisfecho con lo visto y mantuvo a los onces jugadores de la primera mitad. A la hora de partido, con el Barcelona narcotizado, Simeone activó el plan B sustituyendo a Griezmnann por Raúl García y estrenando una dupla más áspera con Mandzukic y García.
A falta de un cuarto de hora, el Barcelona estaba más preocupado por no recibir un gol y el Atlético por mantener a raya a su rival. El primer disparo del Barcelona en la segunda mitad llegó en el minuto 28, por medio de Iniesta. Con Luis Suárez más pendiente de la guerra de guerrillas que del balón, y con Neymar y Messi desaparecidos, la zaga rojiblanca respiraba tranquila. Se desquiciaban los azulgrana, que veían la tarjeta amarilla por sendas protestas de Luis Suárez y Mascherano.
Restaban siete minutos para el final cuando una falta lanzada por Messi se enredó en los pies de la barrera y Juanfran cometió un torpe penalti sobre Busquets. El árbitro no dudó en señalarlo y Messi se dirigió a los once metros. El argentino disparó duro a media altura por el centro de la portería, Oblak lo rechazó en un primer momento, pero el azulgrana lo remachó a la red.
El gol desquició al Atlético, al que le entraron las prisas, especialmente por el hecho de irse del Camp Nou sin marcar. Messi tuvo el segundo en una falta que rozó el larguero mientras en las filas de Simeone se multiplicaban las malas noticias: ni Godín ni Mandzulic estarán en la vuelta. Mal resultado, a juzgar por el juego solvente de los rojiblancos. Magnífico para los azulgrana.
Barcelona: Ter Stegen; Alves, Mascherano, Piqué, Alba; Rakitic (Xavi 76'), Sergio, Iniesta (Bartra 86'); Suárez, Messi y Neymar.
Atlético: Oblak; Juanfran, Godín, Miranda, Siqueira; Mario Gabi (Raúl Jiménez 86'), Koke, Arda; Griezmann (Raúl García 64') y Torres (Mandzukic 46').
Amonestado Juanfran por una entrada a Neymar, a Luis Suárez y Mascherano por protestar, a Mandzukic por no respetar la distancia en la barrera y a Godín por una falta a Messi.
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