Publicado: 03/12/2014 07:22
La juez de guardia decretó la pasada noche la libertad con cargos, por un delito de riña tumultuaria, para los 21 detenidos por la reyerta del domingo entre aficionados radicales del Atlético de Madrid y del Deportivo de La Coruña, en la que murió un aficionado deportivista.
En el auto, la titular de del Juzgado de Instrucción número 34 de Madrid, María del Coro Martínez, dejó en libertad a todos los arrestados -4 del grupo ultra Frente Atlético y 17 de los colectivos radicales Riazor Blues, Bukaneros y Allkor Hooligans- pero con la obligación de comparecer los días 1 y 15 de cada mes en el juzgado, informó el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Todos los arrestados declararon ante la juez y negaron que hubieran quedado previamente para pegarse, han precisado fuentes jurídicas. Durante la vista, la Fiscalía solicitó prisión para siete miembros del Riazor Blues y para dos del Frente Atlético, así como que no se les deje acercarse al estadio Vicente Calderón, pero la juez lo ha rechazado.
Entre estos detenidos que quedaron en libertad no figuran los presuntos autores de la agresión que provocó la muerte a Francisco Javier Romero Taboada
Entre estos detenidos que quedaron en libertad no figuran los presuntos autores de la agresión que provocó la muerte a Francisco Javier Romero Taboada, alias Jimmy, cuyo cadáver llegó a las 17:15 horas al tanatorio de La Coruña para ser enterrado mañana. Los arrestados, que permanecieron dos días en dependencias policiales tras su detención el domingo, llegaron a las 13:40 a los juzgados de Plaza de Castilla en cuatro furgones. Pero su declaración no arrancó hasta horas después, a las 18:25 horas, debido a que la fiscal había pedido estudiar el atestado policial antes de que comenzarán a declarar los acusados.
Los arrestados prestaron declaración desde esa hora y hasta las 21:00 horas y finalmente abandonaron los juzgados a las 22:00 horas, entre aplausos de familiares y allegados y ante un amplio despliegue policial de la Unidad de Intervención Policial, los llamados antidisturbios.
Los arrestados abandonaron los juzgados madrileños entre aplausos de familiares y allegados y ante un amplio despliegue policial
Durante la mañana de este martes, a las puertas de los juzgados madrileños de Plaza de Castilla, la madre de uno de los jóvenes del Riazor Blues detenidos deseó que disuelvan este grupo radical tras condenar los hechos ocurridos cerca del estadio Vicente Calderón. Los hechos tuvieron lugar el pasado domingo, sobre las nueve de la mañana, cuando unos doscientos ultras del Atlético de Madrid y del Deportivo, estos últimos apoyados por otros grupos ultras de ideología similar, se enzarzaron en una reyerta. La Policía Nacional continúa con el análisis de las imágenes de esa pelea para identificar al autor o autores de la muerte del aficionado deportivista.
La macroquedada se gestó hace 15 días
Los "hombres de confianza" de las hinchadas ultras del Frente Atlético y de los Riazor Blues iniciaron hace dos semanas los contactos telefónicos para citarse el domingo 30 de noviembre en los aledaños del estadio Vicente Calderón y mantener una pelea "a mano abierta", es decir, sin armas.
La "quedada" se gestionó hace quince días entre los máximos responsables de estos grupos ultra, que habitualmente mantienen contacto porque disponen de sus respectivos números de teléfono, según informaron a Efe fuentes policiales.
En el terreno deportivo, el Atlético de Madrid anunció la expulsión del Frente Atlético después de "recibir hoy el acta policial que identifica como miembros" de ese grupo ultra "a los detenidos e implicados en la multitudinaria pelea", mientras que el Deportivo cerrará de forma simbólica la grada de los Riazor Blues en el estadio de Riazor durante los próximos dos partidos
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.