¿Se atrevería la Federación Española a prohibir la camiseta cuatribarrada del Barça o la naranja del Madrid?

La Asociación de Fútbol Argentino (AFA) advirtió a uno de los grandes clubes del país, Boca Juniors, de que sería multado si el domingo estrena una nueva camiseta de color rosa que ha sembrado la polémica entre sus propios aficionados. La postura de la AFA es tan firme que los propios federativos argentinos aclararon Boca "nunca pidió jugar con la camiseta rosada frente a Rosario Central", pero aún así reiteraron que "si lo hace deberá pagar una multa".

Al parecer, el problema no es la camiseta, sino los pantalones. El conjunto Xeneize tenía planeado usar la rosa con pantalones azules, pero el equipo canalla (Rosarios Central) los utiliza del mismo color en su indumentaria titular y los jueces de línea exigen que el color de los pantalones de ambos equipos no puede ser el mismo.

Como ambos clubes tienen los colores azul y amarillo, el Rosario tendrá que salir con una camiseta blanca alternativa. En Argentina es tradición que, en caso de coincidencia, sea el conjunto local el que cambie la indumentaria. Menos si elige el rosa.

En España, los clubes cambian a su antojo de segunda y tercera equipación cada temporada, y sólo la protesta masiva de sus aficionados ha conseguida en contadas ocasiones retirar de la circulación algunos uniformes. La Federación Española que preside Ángel Villar no suele meterse en esas cuestiones.