Quantcast

Cultura

Promocionar España como destino de grandes rodajes internacionales... cuando conviene

Una secuencia de la película 'La isla mínima', rodada íntegramente en Andalucía.

Que los rodajes de cine en España son una gran oportunidad para generar empleo indirecto y promocionar el país a gran escala con películas de alto presupuesto es algo que las administraciones saben bien. Por eso echan mano de ello... cuando les conviene. Acaso justamente por eso, las comunidades autónomas aprovechan la Feria Internacional de Turismo (Fitur) de Madrid para mostrar al mercado internacional su cara más cinéfila.

Que los rodajes de cine en España son una gran oportunidad para generar empleo es una verdad dicha sólo cuando conviene. En Fitur, por ejemplo

Exodus, en Almería y Fuerteventura; Atlas de las Nubes, en Mallorca; El Perfume, en Barcelona y Girona; Juego de Tronos, en  Peñíscola y Gerona; el Parque Natural de las Bardenas Reales; el Castillo de Santa Florentina; el Castillo de Zafra y la Alcazaba de Almería.

Ejemplos no faltan. Y cada quien pescuecea para que el suyo parezca el mejor. "Aragón es un escenario en sí mismo", aseguró el presidente de Aragón Javier Lambán en la presentación de Nuestros amantes, la última película del aragonés Miguel Ángel Lamata, en Fitur. Este metraje discurre íntegramente en Aragón, comunidad que se convierte así en una protagonista más del filme y que se acaba de revelar como "un país de cine". Además, Lambán ha marcado como propósito de su gobierno que la producción de cultura represente un 5 % de su PIB porque "nada tiene más prestigio que la cultura".

Andalucía  ha sido escenario de grandes películas como La isla mínima, Star Wars II: el despertar de la fuerza, o Las aventuras del joven Indiana Jones. La provincia de Almería ocupa un lugar mítico en la historia del cine, por ello, la provincia patrocina en Fitur su Almería Film Commission que trata de "facilitar todos los servicios que se pueda necesitar para ahorrar tiempo y esfuerzo" a las productoras que decidan establecer su set de rodaje en la región. La isla mínima fue rodada íntegramente en Andalucía y su director, Alberto Rodríguez, ya fue premiado anteriormente por Grupo 7, rodada en Sevilla.

Extremadura  ha sido destino de grandes rodajes. Desde los inicios del cine con La fierecilla domada en 1956, hasta Hispania, La leyenda, en 2011

La riqueza monumental y natural de Extremadura también es un reclamo para la industria fílmic. por esa razón, la  provincia de Cáceres proporciona una guía, en su stand de Fitur, para "emprender un viaje diferente" a través de los escenarios cinematográficos de la provincia. Desde los inicios del cine en la región con La fierecilla domada en 1956, hasta Hispania, La leyenda, en 2011

Asturias también ofrece a los visitantes un itinerario de cine para recorrer las 25 localizaciones de rodajes cinematográficos por el consejo de Llanes. Si los turistas siguen esta guían podrán disfrutar de los escenarios de películas como El Orfanato o series de televisión como La señora. Así, según la guía, el Ayuntamiento de Llanes quiere "rendir un homenaje y mostrarles su gratitud" a los directores y productores que eligieron sus paisajes para "hacer realidad sus sueños cinematográficos". También el municipio valenciano de Peñíscola ha lanzado un nuevo proyecto turístico, "Peñíscola de Cine", en Fitur con el objetivo de asociar la condición de Peñíscola como "ciudad-plató de grandes e importantes superproducciones audiovisuales a su excelente oferta turística".

Habría que decir, sin embargo, que desde el punto de vista de una legislación general, los incentivos son pocos. En la reforma fiscal se establece un nuevo tipo de deducción del 15% para las grandes producciones internacionales rodadas en territorio español, que modifica la hasta hace poco necesaria coproducción con España, un requisito que, según la Spain Film Commission, hacía que se perdieran el 80% de las peticiones. Si bien la medida supone un paso importante, existen limitaciones administrativas que desincentivan a los productores.

Habría que decir, sin embargo, que desde el punto de vista de una legislación general, los incentivos son pocos

El cine extranjero deja dinero; y bastante. El mejor ejemplo es Exodus, de Ridley Scott. Con un presupuesto de 43 millones, el paso de Exodus por Almería y Fuerteventura dejó 7 millones en las arcas del Estado en forma de IRPF, IVA y cotizaciones a la Seguridad Social. A esta cifra hay que sumar el gasto en alojamiento, alquiler de vehículos y la contratación de otros servicios, como el catering.

El avance en la materia pertenece sin duda a las autonomías que sacan pecho en Fitur. Andalucía confeccionó una normativa para impulsar el mecenazgo, que incluye deducciones adicionales del 15% en la cuota autonómica del IRPF hasta un límite de 240 euros. Además de una comisión de cine que promueve rodajes y proyectos audiovisuales.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.