El polémico y placentero viaje a México de varios ‘cachorros’ del PP a través del Injuve

Un viaje de ocio y estudio al Estado de Puebla, México, organizado por el Instituto de la Juventud (Injuve), ha desatado una pequeña tormenta entre la joven militancia del Partido Popular. Y es que, con motivo de la celebración en junio del G-20 en el gigante centroamericano, la cancillería mexicana organizó la semana pasada un cónclave similar destinado a jóvenes procedentes de los 20 países y denominado “Y-20”. Cada país, pues, reclutó en abril a siete universitarios menores de 25 años, tarea que en España recaló en el Injuve.

El proceso de selección del Injuve era exigente: inglés perfecto, claridad de la exposición, capacidad de síntesis… Y de los siete, al menos tres están fuertemente vinculados al PP: Miguel Martínez Truchaud y Carlos Escoboso son cargos de Nuevas Generaciones y Paula Bueno de Vicente pertenece a FAES, según denuncian anónimamente miembros de NNGG “asqueados”, dicen, “de semejante favoritismo”. De los otros cuatro no ha trascendido, que se sepa aún, militancia alguna cercana al partido en el Gobierno.

La excursión mexicana, al parecer, no ha brillado por su austeridad. Estancia de seis días (del 7 al 12 de abril) en el lujoso Hotel San Leonardo de Puebla, situado en Puebla de Zaragoza, la capital del estado federal, y gastos a cargo del Gobierno mexicano y de entidades privadas de ese país, ida y vuelta incluidas. “Van para hacer relaciones, para salir de juerga y pasarlo en grande. No van para servir un servicio a la sociedad”, carga un joven militante popular, indignado con los mancebos epicúreos.

Tampoco se conocen los criterios de selección del Injuve, dirigido desde enero por Rubén Urosa. A sus 38 años, Urosa es un veterano en la gestión de organismos similares, siempre bajo gobiernos del Partido Popular; entre otras cosas, Urosa fue director general de Juventud de la Comunidad de Madrid durante la etapa de Alberto Ruiz-Gallardón. ¿Enchufe? En NNGG muchos lo tienen claro.  

En el Injuve, por su parte, se insiste a Vozpópuli en que no ha salido "ni un euro del erario público" para sufragar los gastos de los seleccionados y también en que no ha habido ningún trato de favor.