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El Buscón

De cómo 'ABC' dio por muerta a Teresa Romero y perdió 200.000 euros por el error

La necrológica publicada por error

'La niña que quiso ser enfermera' era el nombre de una necrológica que el diario 'ABC' tenía ya escrita por si se diera el caso de que la auxiliar de enfermería Teresa Romero acabara falleciendo a causa del ébola, un hecho que afortunadamente no se produjo. Como es habitual en los medios de comunicación, esta pieza se había dejado hecha con anterioridad por, si se daba la circunstancia de que la auxiliar gallega moría, tirar rápidamente de ella.

"Teresa Romero será siempre recordada como la mujer luchadora y valiente que no venció la batalla del ébola. Comienza el duelo y los rezos para que nadie más salga infectado". Estas y otras perlas se podían leer en una edición en papel que se envió en la madrugada del 22 de octubre a las televisiones. El artículo fue metido en página y, a pesar de que debía de pasar por al menos dos ojos que lo vigilaran (el del jefe de sección, responsable de leer todas las páginas, y el del equipo de cierre, que también debe revisar una a una todas ellas) se mandó a imprenta esta peligrosa página 41 de la primera edición.

Afortudamente, la reacción fue rápida, aunque costosa. Cuentan a este Buscón que fue la propia periodista firmante del artículo la que avisó al periódico de que se había publicado una noticia que daba por muerta a una mujer que había conseguido vencer la enfermedad. Claro, ella no tenía la culpa (de hecho, se encontraba librando cuando aquello pasó) pero era su nombre el que estaba presente en la pieza, y para todo el mundo quedaría como un error suyo. La rápida difusión del error por las redes sociales permitió que se parara a tiempo la que hubiera sido una monumental metedura de pata.

La primera edición es la que se envía fuera de Madrid, a las zonas que no cuentan con una planta de impresión propia, aunque los miles de periódicos impresos con este error no llegaron a sus kioskos de destino. Antes que ello, el director de 'ABC', Bieito Rubido, recibió el aviso de lo que estaba sucediendo para que tomara la decisión. Y tomó la única, costosa pero única decisión posible. Recurrir al famoso: "¡Paren las máquinas! e impedir la distribución de esa edición. El coste total de la broma, le cuentan a este Buscón que ha ascendido a unos 200.000 euros.

Un error lo puede tener cualquiera, aunque los hay más caros y más baratos. Este entra dentro del orden de los errores que salen muy, pero que muy caros a la empresa. Se desconoce si por el momento ha habido represalias a los que tuvieron el fallo 'in vigilando'.

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