Moreno Bonilla: de la pizzería al ministerio de Agricultura

¿El hombre de moda será ministro? José Manuel Moreno Bonilla, designado candidato único para ocupar la presidencia del PP andaluz, ha acaparado estos días espacios informativos en forma abrumadora. La singular fórmula elegida por el presidente del Gobierno para encaramarle a la cabecera del partido en Andalucía, por encima de los planes de Dolores Cospedal, agitó la tormenta y aventó los rumores. La secretaria general de la formación ni siquiera se había dignado a llamarle por teléfono para felicitarle. Un gesto considerado muy poco cortés y nada amigable. Así de duras han estado las cosas en la sede de Génova.

Moreno Bonilla ha sido también objeto de chanza por su disparatado currículum, de un nivel académico más bien ramplón y con numerosas alteraciones según se producían sus ascensos en la escala política. Lo más llamativo del expediente educativo era la profusión de "másteres" que luego no eran tales. Alguno, incluso, no existía. Un exhibicionismo algo provinciano y sin duda trapacero.

Sustituto de Cañete

En las últimas jornadas ha circulado por Moncloa la versión de que su principal mentor, Javier Arenas, estaría incluso promoviéndole en la sombra para ocupar la cartera ministerial de Arias Cañete en el caso de que el titular de Agricultura dé el salto a las listas europeas.

Moreno Bonilla ha salido al paso en estos días de las humoradas sobre su ajetreado currículum. En entrevistas periodísticas ha asegurado que ha trabajado de todo, tanto de pizzero, como de agente comercial o de camarero. Lo que quizás no entraba en sus planes es, en su meteórica carrera y en su celérica ascensión, convertirse tan raudamente en miembro del Gobierno.

Semejante especie se ha comentado con tal intensidad en las últimas horas que incluso en su provincia de origen, Málaga, ha habido dirigentes de la formacióln que este fin de semana la daban por buena. Moreno Bonilla no es diputado en Andalucía, su nivel de conocimiento popular es más bien bajo y a la vuelta de un par de años (o de meses, quén sabe) habrá de enfrentarse al terremoto Susana Díaz, la presidenta de la Junta de Andalucía que se ha adueñado del panorama político regional en tan sólo cinco meses.

Arenas, su mentor, impulsor y protector, ocupó la cartera de Trabajo al propio tiempo que ejercía de presidente del PP andaluz. Su protegido Moreno bien podría hacer lo propio. Ambos son de un perfil similar, simpáticos, accesibles, 'populistos' y con tirón. Moreno necesita darse a conocer y cuanto antes. Una cartera ministerial le vendría al pelo. En ello están algunos. Pero es muy posible que Mariano Rajoy no comparta ese criterio. "Paciencia, hermano", que diría el clásico.