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Educación

¿Sobran los motivos para una huelga educativa? Políticos y sindicatos reaccionan ante la nueva marea verde

La nueva marea verde exige revertir los recortes

A partir de las 18:00 horas de este jueves comenzará la huelga general en el sector educativo convocada desde la Plataforma Estatal por la Escuela Pública, una nueva 'marea verde' que brota en pleno debate por alcanzar un acuerdo entre todos los partidos en torno a esta materia. Así, mientras la subcomisión de Educación -presidida por Teófila Martínez- celebra semanalmente comparecencias de los distintos agentes de la comunidad educativa, un grupo de asociaciones de padres, alumnos y profesores coinciden en que "la lucha en la calle" está siendo el medio "más eficaz" para defender la enseñanza pública y advierten de que el pacto "no es un fin en sí mismo". Se trata de la tercera huelga desde que gobierna el PP y, entre los convocantes, destacan la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), la Confederación Sindical de trabajadoras y trabajadores de la enseñanza (STES), CCOO, UGT, la Confederación General del Trabajo (CGT), MPR, la Federación de Asociaciones de Estudiantes Progresistas (FAEST), el Frente de Estudiantes y el Sindicato de Estudiantes.

Desde el sector de la Enseñanza de UGT exigen la derogación de la LOMCE, la reversión de los recortes en la Educación y en las condiciones laborales de los trabajadores

De acuerdo a estas entidades, "sobran los motivos" para llamar a la huelga. Desde el sector de la Enseñanza de la Federación de empleados de los Servicios Públicos de la UGT, exigen la derogación del RD 14/2012 de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo, que "introdujo los mayores recortes educativos", la derogación de la LOMCE, la retirada del recurso de paralización de esa ley interpuesto por el Gobierno ante el Tribunal Constitucional, la reversión de los recortes en la Educación y en las condiciones laborales de los trabajadores de la enseñanza, el mantenimiento de la jubilación voluntaria anticipada, la negociación colectiva de todos los aspectos que afecten al profesorado y la participación de los agentes sociales en las negociaciones de un "posible" Pacto por la Educación.

La posibilidad de alcanzar un acuerdo se cuestiona por parte de varios sindicatos. Es el caso del liderado por Ana García que lo ha llegado a considerar una "farsa". "Llegar a un acuerdo en líneas positivas con PP y Ciudadanos es imposible. Pueden llamarlo Pacto Educativo o 'Perico de los Palotes', pero si no llevan a la práctica las demandas mayoritarias en este ámbito, solo será devolvernos al camino de los recortes y la segregación de los estudiantes que venimos de familias humildes", dijo a Vozpópuli. Desde CCOO llaman a la participación por "la dignificación de las condiciones de trabajo y contra los recortes". "Hoy trabajamos más horas y con más alumnos y alumnas. Con salarios que han visto mermado su poder adquisitivo entre un 18 y un 21%. Con tasas de temporalidad que superan el 20%. Y con miles de compañeros y compañeras menos", denuncian.

"No es contradictorio"

Por su parte, el ministro de Cultura y Educación, Íñigo Méndez de Vigo, considera que algunos de los convocantes de esa manifestación han acudido a ese debate pero "han aportado poco, desgraciadamente han criticado mucho pero aportar poco". Desde el Congreso, el socialista Manuel Cruz, considera que "no hay indicios para pensar que no habrá pacto, sino más bien al contrario". "Los objetivos y reclamaciones de los estudiantes no son contradictorios con alcanzar el acuerdo", considera. Para Cruz, un ejemplo es la reversión de los recortes. "Esa reivindicación no tiene porque esperar a que haya un pacto educativo. Entendemos que esos recortes están afectando a la calidad del proceso educativo, en ningún caso se puede interpretar como una interferencia ni como una contradicción", opina. Y añade que cuando una manifestación es convocada por muchas instancias "es muy complicado estar de acuerdo en todo, pero es que no hace falta".

Desde Ciudadanos no apoyan la llamada a salir a la calle este jueves. "Respetamos el derecho a la huelga, como no puede ser de otra manera, pero en Ciudadanos lo que nos corresponde es trabajo y negociación para encontrar soluciones. Es obvio que la situación educativa en España es criticable y mejorable. Ciudadanos, negociando,  ha conseguido que el Gobierno accediera a otorgar una moratoria en la aplicación de la LOMCE y que el PP solicitará la apertura de una subcomisión para elaborar una nueva ley", explican fuentes de la formación dirigida por Albert Rivera.  Y añaden que el Decreto Ley para la eliminación del carácter académico de las reválidas y la petición de apertura del Pacto Social, Político e Institucional por la Educación "se han conseguido trabajando y negociando, no mediante huelgas".

"Cese de hostilidades"

En C's entienden que la subcomisión para elaboración de una nueva normativa en materia de educación supone una derogación por sustitución de la LOMCE, que es lo más razonable. "La derogación por la derogación tal y como se está demandando, sin una nueva norma que la sustituya y que la mejore nos parece que sumiría en un caos legislativo a los profesores, alumnos y familias.  Lo importante ahora es ponernos a trabajar sin dilación en unas bases para una nueva Ley Básica de Educación que permita solucionar los problemas. Insistir en la confrontación sin soluciones nos parece un error", consideran.

El Pacto por la Educación es lo suficientemente importante para que todas las partes dejemos al lado intereses partidistas y escuchemos y trabajemos con generosidad, rigor y calma"

En esa línea, no les parece que una huelga ahora "sea pertinente": "Para que una negociación salga adelante y llegue a buen puerto, el contexto es muy importante.  Creemos que, si de verdad se trata de mejorar la educación hubiera sido bueno, al menos coyunturalmente, un cese de hostilidades temporal para favorecer el diálogo y el consenso. El Pacto por la Educación es lo suficientemente importante para que todas las partes dejemos al lado intereses partidistas y escuchemos y trabajemos con generosidad, rigor y calma". Además, opinan que algunas asociaciones quizás se han quedado en la crítica destructiva pero, afortunadamente, otras han hecho una crítica constructiva. "Criticar, apuntar los diagnósticos sobre cuestiones que no funcionan es bueno. Ahora bien, sería conveniente que inmediatamente después se aportaran propuestas concretas sobre cómo mejorar. Esto exige trabajo, reflexión, capacidad de análisis y de síntesis y sobre todo voluntad de que las cosas cambien".

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