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Cultura

O'Shea da un toque a Botella y Villalonga: "Nos han fallado las instituciones oficiales"

Paloma O´Shea, pianista, filántropa y mecenas, además de esposa de Emilio Botín, presidente de Santander.

Paloma O'Shea, pianista, filántropa y mecenas, ha dicho este miércoles que si ha logrado sortear la crisis y la falta "absoluta" de apoyo financiero ha sido gracias al empeño. Se refiere, claro está, a la Fundación Albéniz y la Escuela Suerior de Música Reina Sofía, instituciones que ella preside, y que se han visto obligadas -al igual que el resto de las instituciones culturales- a sobrevivir "apretándose el cinturón con inteligencia". Así lo hizo saber O'Shea este miércoles durante la presentación del curso 2013/14, donde aprovechó para lanzar este mensaje: "Nos han fallado las instituciones oficiales: la Fundación Carolina, el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Cultura. Nos dan cero, aunque antes nunca haya llegado más allá del 12%".

Resuena especialmente este mensaje de la directora de la Fundación Albéniz cuando no se cumplen ni siquiera tres meses del contundente intercambio epistolar que sostuvo con Fernando Villalonga, exdelegado de las Artes y ahora presidente de Madrid Destino, la empresa municipal que agrupa las actividades culturales del Ayuntamiento de Madrid y que Villalonga capitanea tras verse obligado a dejar su cargo como concejal de las artes tras la sentencia del Tribunal Constitucional según la cual los concejales delegados no electos no podían formar parte del Gobierno municipal.

La polémica entre Villalonga y O'shea, ocurrida en agosto y que trascendió a los medios de comunicación, estuvo ocasionada por la eliminación de las subvenciones municipales al Instituto Internacional de Música de Cámara de Madrid, órgano presidido y promoovido por O'Shea como parte de un convenio con la Fundación Albéniz, el Ministerio de Cultura de España, la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Madrid y la Fundación Caja Madrid. El Instituto recibía desde 2007 unas ayudas públicas de 240.000 euros que quedaron reducidas a cero. Allí estalló la mecha.

"Nos han fallado las instituciones oficiales. Nos dan cero, aunque antes nunca haya llegado más allá del 12 %"

La discusión entre O'Shea y Villalonga fue de todo menos cultural. La mecenas, asombrada por el recorte, elevó su protesta. Fernando Villalonga le contestó acusándole de valerse de su condición de mujer del banquero más poderoso de España -O'Shea está casada con Emilio Botín- para hacer filantropía. En respuesta, O'Shea reprochó al encargado cultural del Ayuntamiento el querer descalificarla con argumentos “sexistas”, en lo que, a su juicio, era un “ataque mendaz” que dejaba clara su "falta de talla política".

De ahí, justamente, que tengan especial resonancia las palabras pronunciadas este miércoles por la presidenta de la Fundación Albéniz y directora de la Escuela Superior de Música Superior Reina Sofía, quien estuvo acompañada en el acto de presentación del curso 2013-2014 por el director de la Fundación BBVA, Rafael Pardo. En la rueda de prensa, O'Shea aseguró que "defenderá" el proyecto musical gracias a los 4,6 millones de euros aportados por sus mecenas, entre los que se encuentran, entre otros, Helena Revoredo, la Fundación Juan Miguel Villar Mir, Telefónica y la Fundación Banco Santander y la Fundación Mahou, que han "reforzado" su aportación.

Creada con el propósito de dotar a España de un centro de alta formación profesional dirigido a jóvenes músicos de talento, la Escuela Superior de Música Reina Sofía acoge un centenar de estudiantes de más de 20 países, y sus alumnos son ya el 12 % de los miembros de las orquestas españolas.

¿Y qué ocurre con el resto?

No todos tienen la capacidad de financiación de la Fundación Albéniz. Quedó claro a finales de este verano cuando cerca de 1.000 profesionales que tocan en las 26 orquestas sinfónicas que hay en España protestaron con un concierto simultáneo para denunciar su delicada situación. Conservatorios, escuelas de música y orquestas atraviesan por una situación muy delicada: bajadas salariales, contratos precarios, disminución de las subvenciones públicas, ERE y despidos... No son buenos tiempos.

En el año 2010 había cerca de 1.000 escuelas de música en toda España, que daban servicio a 200.000 alumnos, según la última guía de la Federación Española de Municipios. Dependen de ayuntamientos y comunidades y la crisis ha hecho que las administraciones hayan destinado sus agotados recursos a otras áreas antes que a la enseñanza de la música. Es difícil cuantificar cuántas están padeciendo los recortes.

En Valladolid, por ejemplo, el ayuntamiento ha cerrado la escuela municipal Mariano de las Heras, que llevaba 18 años funcionando. También ha seguido el mismo camino la de Ciempozuelos (Madrid), donde sus 14 trabajadores han sufrido un ERE. En julio la Orquesta Sinfónica de Extremadura sufrió expediente de regulación de empleo extintivo después de que sus 62 trabajadores se negaran a cambiar sus contratos fijos por fijos discontinuos. Los profesionales de la Sinfónica de Sevilla tuvieron que rebajar sus suelos un 5% y los de Baleares también.   

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