Nuevo motor diésel y caja automática de 9 velocidades para el Honda CR-V

El segmento de los todo terreno ligeros o SUV sigue creciendo en penetración en el mercado, sobre todo los de tamaño pequeño y compacto, sustituyendo en muchos casos a las tradicionales berlinas medias. Y en él, el CR-V de Honda acumula en este 2014 unas ventas sin duda muy interesantes, por cuanto supera a los modelos más relevantes de las tres grandes marcas alemanas Audi, BMW y Mercedes como son el Q5, el X3 y el GLK, éste último ya superado en ventas por el más nuevo GLA, un SUV de carácter mucho más de asfalto que el propio GLK.

Y para mantener al CR-V en esos lugares de privilegio que ahora ocupa, Honda introducirá importantes novedades para consolidar una oferta, a día de hoy, un tanto limitada, por cuanto su modelo comercialmente más interesante es el 1.6 diésel de 120 CV, dejando como opción algo más dinámica, y no mucho, al veterano bloque de 2,2 litros y 150 CV, una mecánica poco adaptada a los tiempos actuales por su cilindrada y sus consumos claramente por encima ya de la media en esos niveles de potencia.

Así, a partir de marzo de 2015, el CR-V adoptará la última evolución del bloque diésel de 1,6 litros que forma parte de la serie “Earth Dreams Technology” de Honda. Un conjunto propulsor de nueva generación que ofrece un rendimiento muy elevado y unas bajas emisiones de CO2 con una de las mejores relaciones de potencia y eficiencia del mercado. Un motor que llegará para sustituir al propio diésel de 2.2 litros.

Rinde nada menos que 160 CV y 350 Nm de par y, en combinación con la transmisión manual de seis velocidades, el nuevo motor ofrecerá unas emisiones líderes en su segmento, por debajo de 130 g/km de CO2, lo que supone una mejora del 11 % en comparación con el bloque anterior. Además, llegará con la posibilidad de montar en opción una novedosas caja de cambios automática de 9 velocidades para contribuir sacar el máximo partido de la eficiencia de este motor que, como muestra de ello, anuncia unas emisiones de CO2 inferiores a 135 g/km, lo que supone una mejora del 20 % con respecto a su predecesor.

Todo ello reforzado por un diseño exterior que tendrá un estilo ligeramente actualizado, con nuevos grupos ópticos, parrilla delantera, faros antiniebla y paragolpes rediseñados, que potencian la estética del frontal. Por otro lado, en la parte trasera, las luces LED multifunción y el diseño renovado del portón y el paragolpes se suman a las mejoras del CR-V 2015.