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España

Rajoy culpa del ajuste al Gobierno anterior mientras la prima de riesgo se dispara

Mariano Rajoy y Javier Arenas este miércoles en Antequera

Mariano Rajoy comparecía poco después de las 13.00 horas ante el Comité Ejecutivo del PP que tenía lugar en Antequera, Málaga, justo en un momento de la jornada en que la prima de riesgo española empezaba su descenso desde los 392 puntos que llegó a alcanzar a media mañana. El presidente del ejecutivo lanzaba un claro mensaje de que pese a las críticas, el actual gobierno es un gobierno serio, que sabe lo que tiene que hacer, que lo está haciendo, y que va a sacar al país de la pésima situación económica que lo rige. 

Rajoy comenzaba su discurso con agradecimientos, especialmente para Javier Arenas y su equipo por el trabajo realizado en los últimos meses, y por dar batalla en unas andaluzas que hace unos años nadie imaginaría que llegarían a ganar los populares. "Tienen mi apoyo como presidente y el del Comité Ejecutivo, y lo tienen porque se lo merecen", aseguraba categórico. Dicho lo cual, pasó a establecer las principales pautas fijadas de cara al futuro. "La perseverancia, constancia, esfuerzo y convicción siempre dan frutos, antes o después. Ahora toca hacer las cosas bien e intentar hacerlas mejor todavía. Tenemos que ver dónde podemos mejorar, mantener la voluntad del partido, estar tranquilos y serenos porque es la mejor forma de abordar el futuro, la más inteligente. Tenemos por delante una gran tarea a desarrollar en el parlamento andaluz en los próximos cuatro años, y hay que apoyar al Gobierno de España", explicaba Rajoy. 

Somos un gobierno serio, que sabe lo que tiene que hacer y que va a sacar España adelante

Cerrado al capítulo andaluz, el presidente del Gobierno hacía referencia una vez más a los problemas a los que se enfrenta España: una situación de extrema dificultad donde la gente ve que ha perdido nivel de vida, pero también un gran reto que afronta con la certeza de que lo va a saber gestionar. Las críticas de estos días tras la presentación de su plan económico para 2012 las reconduce hacia sus predecesores, afirmando que son "los que nos han traído aquí los que más están protestando". En 2012 el ejecutivo se va a dedicar a pagar intereses de la deuda pública, 29.000 millones de euros que si no hubiera deuda podrían dedicarlos a mejorar los servicios públicos o a no subir impuestos, o incluso a mejorar la sanidad o las pensiones. "Además, tenemos una diferencia de 90.000 millones entre lo que gastamos y lo que ingresamos, algo insostenible. Esos 90.000 millones menos tenemos que pedirlos, y hay países a los que ya no les prestan. También hay instituciones en España a las que tampoco les prestan ya y no les refinancian su deuda", matizaba. 

Los 'deberes sin hacer' del Gobierno PSOE

En su exposición también había lugar para reproches a la gestión del anterior ejecutivo, admiendo que si el Gobierno socialista hubiera cumplido sus compromisos con la UE y el déficit hubiera alcanzado el 6%, el recorte habría sido de 18.000 millones menos en 2012, y de 10.000 millones menos al año siguiente. "Esto es una prioridad y esto hay que seguir haciéndolo, y lo tienen que hacer también las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos. Y quien no lo entienda así le crea un problema al resto de los españoles. Estas cosas no gustan y vamos a recibir muchas críticas, pero cuando uno actúa con convicción, seguridad y la conciencia tranquila, tiene la fuerza suficiente para sacar este país adelante", declaraba con firmeza. 

Rajoy se reafirmaba al decir que en tres meses han hecho más reformas en economía que en los últimos 8 años, reformas que según él ya deberían haber estado hechas hace años, algo que hubiera evitado problemas. Por el momento, han reformado la Ley de Estabilidad Presupuestaria, han llevado a cabo una reforma laboral, una reestructuración del sistema financiero, modificado los organismos reguladores, y han intentado romper la dinámica de no pagar a los proveedores, algo inaceptable desde su punto de vista. "Hemos hecho una operación de 35.000 millones de euros para aliviar la posición de algunas instituciones públicas y de muchísimos proveedores a los que no se les pagaba. Aprobamos una Ley de Mediación, y unos presupuestos donde el déficit público se va a reducir al 5,3%. Para ello vamos a tener que pedir 60.000 millones de euros para cubrir el déficit público, nos lo van a financiar, y lo harán mejor si ven que vamos a ir haciendo reformas para cubrir el gasto", sentenciaba.

Para cerrar su discurso, y una vez que ha confesado que no esperaba ninguna ayuda del PSOE para llevar a cabo sus ajustes, pedía ayuda para el Gobierno, "ya que el reto es gigantesco pero lo llevará a cabo un ejecutivo serio que hará lo que tiene que hacer, lo que le han pedido los habitantes, que es sacar a España adelante". 

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