Publicado: 10/10/2013 04:00
Hace justo una semana, la ‘baronesa’ andaluza del PSOE ofreció una conferencia en Madrid eligiendo como presentador a Manuel Campo Vidal, el periodista que ha moderado la mayoría de los debates electorales en los que han intervenido candidatos a la presidencia del Gobierno, un dato a registrar. En la sede federal del PSOE había muchos que la habían definido como una mujer escasamente preparada, muy de aparato, incapaz de dar el salto a la política nacional. Sin embargo, su verbo y su discurso sedujeron en los salones del Ritz y ahora hay quien la observa como una mujer de altos vuelos, ambiciosa y dispuesta a ponerse el mundo por montera. Las malas lenguas aseguran que su proyecto inicial consiste en consolidarse como presidenta andaluza, pacificar su partido en esta comunidad y más tarde… centrar su cabeza en Madrid y en la pericia que tendría que guiar al PSOE para recuperar La Moncloa.
Susana Díaz ha advertido a Rubalcaba de que hay que dialogar con el Gobierno sobre Cataluña, Presupuestos y Ley de Transparencia
La entrevista que mantuvo este miércoles con Alfredo Pérez Rubalcaba arrojó algunas pistas sobre los planes de la ‘baronesa’. Más allá de la versión oficial y del buen rollo que rodeó el encuentro, Susana Díaz dejó huella al apostar por la apertura de un diálogo amplio con el Gobierno, comenzando por Cataluña y extendiéndolo a los Presupuestos estatales para 2014 y a la ley de Transparencia.
La invitación la hace en un momento en el que Rubalcaba ha dado por rotos todos los cauces de comunicación con el Gobierno y su presidente como consecuencia de su actitud ante el ‘caso Bárcenas’. Y razonó la necesidad de este diálogo: “En Cataluña, hace 10 años el independentismo estaba por debajo del 15%, ahora estamos en otra situación y todos los partidos tenemos que reconocer nuestros errores. El problema, pues, no es solo de dinero”. La negociación presupuestaria la circunscribe en la urgencia que tiene Andalucía en desarrollar el corredor mediterráneo y potenciar el puerto de Algeciras. Por último, Díaz considera que carece de sentido negarse a hablar de la ley de Transparencia cuando la norma estatal puede condicionar tanto las leyes que varias comunidades están elaborando en la misma dirección.
La presidenta andaluza no ha descartado, delante de Rubalcaba, la posibilidad de un congreso extraordinario: "El calendario del partido será el que necesiten los ciudadanos"
La enmienda a la totalidad que Susana Díaz le presentó este miércoles al secretario general del PSOE tiene también derivada interna de alto voltaje. Un día después de que el expresidente de la Junta extremeña Juan Carlos Rodríguez Ibarra pidiera a través de El País un congreso extraordinario para el PSOE que acabe con la inercia de la ejecutiva que dirige Rubalcaba, la presidenta andaluza advirtió delante de este último de que “el calendario del partido será el que necesiten los ciudadanos, no el que obedezca a intereses particulares”. Este no descarte del congreso extraordinario puede terminar echando por tierra el guion mediante el que el líder del PSOE aspira a retrasar la elección del futuro cartel electoral hasta después de los comicios municipales y autonómicos de 2015.
Pese a estas alertas, la versión que se ofrece desde la sede federal del PSOE sigue siendo la misma que la de hace dos meses, cuando José Antonio Griñán inició su retirada: “Susana Díaz no supone peligro alguno para Rubalcaba porque su prioridad es asentarse en Andalucía”. Está por ver.
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