Quantcast

España

Rubalcaba orilla la crisis del PSC y ofrece introducir en la Constitución lo que tumbó el Constitucional para Cataluña hace cuatro años

El scretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba (c), junto a la vicesecretaria general, Elena Valenciano, y José Antonio Griñán al inicio hoy del Comité Federal del partido.

La propuesta de Rubalcaba no es nueva, pero sí lo es el momento en el que la vuelve a defender, con una crisis interna dentro del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) todavía irresuelta que preocupa seriamente en el PSOE por sus efectos electorales en todo el territorio nacional. Sin haber acertado a gestionar sin traumas este enfrentamiento, Rubalcaba ha propuesto hoy una ambiciosa reforma constitucional que reconozca las señas de identidad de Cataluña, las mismas que eliminó el Tribunal Constitucional hace cuatro años cuando dejó sin efectos en el  preámbulo del Estatuto el concepto de nación. El secretario general del PSOE considera llegado el momento de incluir en la Constitución los derechos y deberes de Cataluña, el reconocimiento de su lengua y otras referencias que ahora entran en el debate del proceso secesionista y que, en buena lógica, también podrían querer poner en valor el resto de las nacionalidades históricas. Mariano Rajoy ya ha advertido que no quiere abrir un melón de alto riesgo.

Rubalcaba propone que la Constitución reconozca a Cataluña como nación así como la singularidad de su lengua, sin avanzar qué pasará con el resto de las comunidades históricas

Rubalcaba ha sentado cátedra asegurando que esta reforma constitucional, que en su opinión debería albergar también un modelo de financiación autonómica permanente y claro, es el único camino para superar el antagonismo entre la recentralización, que coloca del lado del PP, y la independencia. El líder socialista ha reclamado también que el Senado se convierta en una Cámara de representación territorial, justo cuando ha propuesto encauzar todo el debate sobre Cataluña a través del Congreso. Difícil de entender.

Rubalcaba ha completado la inauguración del comité federal elogiando al presidente del Banco Central Europeo, pues ha sido Mario Draghi quien, en su opinión, ha traído la recuperación económica y no las medidas de ajuste hechas desde el Gobierno. Como si no hubiera tenido nada que ver con la gestión de Zapatero entre mayo de 2010 y noviembre de 2011, con los ajustes ni con la reforma laboral que el PSOE aprobó entonces, Rubalcaba ha prometido que lo primero que hará su partido en caso de ganar las próximas elecciones será derogar la actual legislación que regula el mercado de trabajo, a su juicio la medida más dañina de todas las que ha tomado el PP desde que empezó a aplicar su política económica. Olvidando también que el anterior Gobierno socialista al que él perteneció fue el primero en congelar las pensiones, Rubalcaba se ha comprometido a enterrar esta reforma, así como la educativa y la del aborto, ejes sobre los que girará buena parte de la campaña electoral para las europeas de mayo. De la crisis de la Corona, ni hablar.

El líder socialista no aclara si se presentará a las primarias previstas para noviembre y se queja del gran poder mediático que tiene el Gobierno

Rubalcaba tampoco ha dado pistas sobre sus intenciones de presentarse o no a las primarias para repetir en el cartel electoral. Se celebrarán a finales de noviembre, dos meses antes que las que se convocarán para elegir a los candidatos a las municipales y autonómicas de mayo del año que viene. Quedan dos años de legislatura, ha dicho, el PP ha perdido la mayoría social, ha sentenciado, y a los socialistas les toca bailar con la más fea pues “tenemos mucho menos poder mediático que el Gobierno”. La batalla de la comunicación, ha concluido Rubalcaba, será clave, una obviedad que preocupa y mucho en las filas socialistas al haber perdido algunos de los buzones que siempre aportaron al PSOE un arma con potente capacidad de tiro.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.