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Ortega le saca a Inditex un rendimiento equivalente al 2% del PIB español

Se trata de una cifra alejada de todas las dimensiones y más teniendo en cuenta el actual contexto de crisis en el que se encuentra el mercado. Pero frente a lo que ha ocurrido en muchas de las cotizadas, Inditex ha multiplicado por más de cuatro su cotización y su dividendo y, sin embargo, ha reducido más de cinco veces el peso de la retribución al consejo en relación con los resultados de la compañía.

Aquellos que hayan ido de la mano de Ortega han visto engordado su patrimonio en casi idéntica proporción, aunque desde luego partiendo de una base muy inferior.

El rendimiento bursátil de Inditex no ha entendido de crisis ni de mercados de crédito estrangulados. Desde el estallido de las hipotecas subprime en Estados Unidos, considerado como el primer síntoma del periodo de depresión que atraviesa actualmente la economía mundial, las acciones del gigante textil se han revalorizado un 40%, una circunstancia que no tiene paragón en el mercado español ni entre las grandes empresas de Europa.

En este mismo periodo, el Ibex-35, índice selectivo de la bolsa española, ha registrado un recorte cercano al 47%. El indicador resiste aún menos la comparación con Inditex desde que la empresa fundada por Ortega comenzó a cotizar. En estos poco más de diez años, los títulos de la compañía se han anotado un avance global del 240%, mientras que la bolsa española acumula un retroceso del 18%, desmintiendo así el viejo aforismo que da por bueno que cualquier inversión en bolsa a una década es rentable.

Un empresario como una compañía Ibex 

A precios actuales de mercado, las plusvalías latentes que Amancio Ortega acumula con su paquete de acciones de Inditex ascienden a más de 16.700 millones de euros. Para hacerse una idea de la dimensión de estas cifras, tan sólo siete empresas del Ibex-35 cuentan con una capitalización bursátil superior.

A esto hay que añadirle los escandalosos ingresos en concepto de dividendo que ha ingresado Ortega desde que Inditex es una empresa cotizada. En total, 2.675 millones de euros, gracias al incremento progresivo de la retribución al accionista que ha protagonizado la compañía. Lejos quedan los 35 céntimos por título que abonó a sus socios a cuenta de los resultados de 2003. Desde entonces, la cifra ha engordado un 140%.

En cambio, los emolumentos percibidos por el consejo de administración de la compañía no han evolucionado precisamente en esta línea sino más bien todo lo contrario.

Si se toma como referencia la proporción entre la remuneración de los consejeros y los beneficios de la empresa, el resultado es sorprendente. Mientras que en 2004, esta variable ascendía a cerca de un 2%, en 2010 quedó fijada en un exiguo 0,3%. En 2004, los consejeros ejecutivos cobraron 5,1 millones de euros en total. El pasado año, percibieron 4,3 millones de euros (bien es cierto que en 2010 tan sólo eran dos mientras que en 2004 eran cuatro).

Con estos datos sobre la mesa, es difícil negar que los primeros diez años de Inditex en bolsa han constituido toda una década prodigiosa, que ha contribuido a hacer aún más rico a su fundador pero que ha ofrecido similares oportunidades al resto de accionistas.

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