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España

Monago mantiene su órdago de adelantar a sus funcionarios la paga de junio a enero

El presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, no cambia sus planes de abonar una paga extra a sus funcionarios en el mes de enero. Ni siquiera la decisión de Moncloa de recurrir ante el Tribunal Constitucional la extra de Navidad que pretendía pagar el Ejecutivo vasco les disuade de una medida que Monago considera innegociable. Fuentes del gobierno extremeño indicaron a Vozpópuli que "a nosotros no se nos hace mención en el recuso al Constitucional por lo que seguimos adelante".

Apuntan en este sentido que se trata de dos situaciones distintas, puesto que en el caso de Extremadura no se trata de sumar la extra eliminada por el Gobierno a todo el personal laboral del sector público "sino adelantar la paga de junio a enero", esto es, un desembolso por adelantado al objeto de insuflar liquidez a las familias en un momento en que se dispara el consumo por tratarse de la principal época de rebajas del año. Hablamos de unos setenta millones de euros, según han estimado en una comunidad "que no tiene tensiones de tesorería" y que se encuentra entre las que no han acudido al Fondo de Liquidez Autónomica (FLA), al menos este año, y cuyo déficit se sitúa una décima menos de lo que le exigen para 2012, esto es, un 1,4, "por lo que no vamos a dejar de intentar alguna medida de estímulo, al menos del consumo", aducen las fuentes consultadas por este medio.

En el entorno de Monago explican que las críticas a esta medida no han venido tanto del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, o de la secretaria general del PP y presidenta de la Comunidad de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, como de otros "segundos y terceros niveles del Gobierno y del partido". Es más, aseguran que tanto Rajoy como Cospedal "comprenden la decisión" y la posición de Extremadura.

El presidente extremeño ya ha roto en distintas ocasiones la disciplina interna para actuar por su cuenta frente al criterio del Gobierno central: renovables, IVA cultural...

Pero esta no constituye la única ocasión en que Monago rompe la disciplina popular marcando perfil propio, entre otras cosas porque su supervivencia al frente del gobierno regional depende de no enfadar a Izquierda Unida y se plantee la presentación de una moción de censura junto al PSOE. De momento ese flanco lo tiene más o menos tranquilo con la reelección, a principios de mes, de Pedro Escobar como líder de la coalición, el mismo que decidió no pactar con los socialistas y posibilitó la llegada del PP al Gobierno extreño por vez primera en democracia. Y es que Monago no dudó en llevar al Constitucional la moratoria decretada por el Ministerio de Industria a las energías renovables, anunciar la puesta en marcha de un impuesto a las bolsas de plástico de un sólo uso, idéntico al que implantó Andalucía hace un año y medio o rebelarse contra el IVA cultural para inroproar en sus presupeustos una compensación a la industria cultural.

Peor suerte ha corrido la decisión del País Vasco de abonar la paga extra de Navidad a sus 67.000 funcionarios. El pasado martes el Tribunal Constitucional admitió el conflicto de competencias planteado por el gobierno central, lo que deja en suspenso la iniciativa de Patxi López, hoy sustituido en la presidencia del Ejecutivo vasco por Íñigo Urkullu. De momento, parece que Navarra sí ha conseguido burlar la estricta vigilancia de Hacienda y Administraciones Públicas puesto que ha convertido en "complemento personal transitorio" una paga que pretender compensar la pérdida de poder adquisitivo de su personal.

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