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España

El 'pequeño Nicolás' posa con un arma en su foto de perfil de Facebook

El detenido durante la recepción de Felipe VI

Francisco Nicolás Gómez-Iglesias, más conocido como el ‘pequeño Nicolás’ quien hizo pasarse durante un tiempo por amigo del rey Felipe VI –colándose incluso en su proclamación el pasado 19 de junio-, por hombre de confianza del Gobierno de España e incluso por miembro del CNI, bloqueó este viernes por la tarde la recepción de mensajes de desconocidos en Facebook, para reactivarla la mañana de este sábado. Además, el joven de 20 años, puesto en libertad sin fianza este viernes cambió su foto de perfil en la red social y puso una en la que sale con un arma en la mano irquierda. 

Además, el ‘pequeño Nicolás’ también ha bloqueado a los desconocidos su perfil y ahora sólo se puede ver su imagen personal, una fotografía que parece ser un selfie. Además, su imagen de portada ya no es con la jet-set, sino es un paisaje de una playa. Entre los 698 amigos que tiene en la popular red social, el que fuera acusado de estafa, falsedad y usurpación de identidad, cuenta entre sus amistades de Facebook con el periodista Alfredo Urdaci. 

En libertad provisional

La jueza de instrucción número 24 de Madrid, Mercedes Pérez Barrios, acordó este viernes la libertad provisional sin fianza de Francisco Nicolás. En un auto, la magistrada le obliga a comunicar al Juzgado cuantos cambios de domicilio realice, le prohíbe abandonar el territorio nacional, le retira el pasaporte en el caso de que tenga y le apercibe que el incumplimiento de estas medidas pueden suponer una reforma de su situación procesal.

La jueza relata que la Policía Nacional -que le atribuyó además la falsificación de informes del Centro Nacional de Inteligencia y hacerse pasar por miembro del mismo- puso al detenido a disposición judicial como presunto autor de delitos de falsedad documental, estafa y usurpación de funciones públicas.

El atestado detalla que el imputado ha desarrollado una intensa actividad en actos públicos con presencia en ellos de altas personalidades y altos directivos de sociedades financieras y de la vida económica en general. El auto agrega se hacía pasar por cargos de la vida política pero no consta que haya sido exhibida documentación alguna que avalara sus afirmaciones verbales.

La jueza explica que, como consecuencia de documentación gráfica de estas reuniones y haciéndose pasar como asesor de la Vicepresidencia del Gobierno, logró que Javier M. de la H. le entregase 25.000 euros con la promesa de que intentaría que el Ejecutivo mediase en la venta de un inmueble de Toledo propiedad de la víctima. Explica que el imputado entregó a dicha persona un dossier titulado "Palacio de la Moncloa. Protocolo de actuación de Javier M. de la H. Gobierno de España", con supuestas firmas del secretario de Estado y el subsecretario de Estado de Presidencia. Según indica el auto, el detenido ha reconocido haber efectuado dicho informe y haber escaneado las firmas, y ha devuelto 10.000 euros.

El imputado se desplazaba por Madrid en vehículos de alta gama a los que añadía un luminoso semejante a los utilizados por las fuerzas de seguridad, añade. En el registro en su domicilio fueron intervenidos otros dossieres elaborados por el detenido bajo la apariencia de oficialidad, dos autorizaciones falsas para vehículos del Palacio de la Moncloa y placas de la Guardia Civil y de la Policía Municipal.

La jueza aclara que no acierta a comprender cómo un joven de 20 años, "con su mera palabrería y aparentemente con su propia identidad, puede acceder a las conferencias, lugares y actos a los que accedió sin alertar desde el inicio con su conducta a nadie por muy de las juventudes del Partido Popular que manifieste haber sido". Añade que "tampoco se comprende que pueda prosperar su afirmación de ser asesor del Gobierno de España, máxime si se tiene en cuenta el informe del médico forense que observa en el detenido una florida ideación delirante de tipo megalomaníaco".

La instructora explica que existen bastantes motivos para estimar que cometió falsedad y estafa, pero aclara que la privación de libertad es una medida excepcional y que no encuentra razones para acordar la adopción de "una medida tan grave como la interesada por el fiscal". En este sentido no aprecia riesgo de fuga pues es español y tiene arraigo en Madrid, donde reside con su familia y cursa estudios superiores.
También considera que, dada la publicidad del caso, el riesgo de reiteración de la conducta se ha reducido prácticamente a cero y todas las pruebas que pueden aportarse han sido obtenidas en el registro efectuado el martes pasado.

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