Florida Park languidece en pleno Retiro a la espera de que Botella lo realquile

Florida Park, la célebre sala de fiestas, comidas y espectáculos situada dentro del Parque del Retiro, cerró en junio tras vencer la concesión municipal de diez años a la empresa gestora, Parque Jardín S. A. Y lleva casi cinco meses acumulando polvo en medio del parque más emblemático de la capital, sin previsión de que vaya a abrir en las próximas semanas, véase meses.

El último espectáculo anunciado en la web data del pasado 2 de abril, aunque la sala echó completamente el candado a mediados de junio. Vencía así la segunda y última concesión (desde 1992) a Parque Jardín, que abonaba por el alquiler 150.000 euros anuales al Ayuntamiento de Madrid.

Mantener a los trabajadores

Una vez clausurado, el equipo de Ana Botella se comprometió a hacer dos cosas, según fuentes de la empresa: la primera, que el pliego de condiciones para que una nueva entidad explote el recinto se publicaría “en meses”; y la segunda, que en el pliego obligaría a que los 24 trabajadores de Parque Jardín fueran subrogados, es decir, contratados por la nueva arrendataria. Pero nada se sabe del primer compromiso, ni mucho menos del segundo.

Florida Park depende, de hecho, de la concejalía de Retiro, cuya presidenta es Ana Román. Parque Jardín está en medio de un ERE, y sus empleados esperan abúlicos a que el concurso sea publicado. Entretanto, parte de la oposición ya ha tomado nota del relativo abandono que padece la conocida sala.

Deterioro de meses

“No entendemos por qué el Ayuntamiento no ha sacado el nuevo pliego, teniendo en cuenta que la sala lleva meses deteriorándose”, lamenta Jorge García Castaño, concejal de IU. “No sacar el pliego o retrasarlo supone una merma de ingresos para la ciudad y un perjuicio para los trabajadores. También esperamos que en el pliego aparezca bien clara la subrogación de los empleados, sin triquiñuelas”, remacha el edil.

Míticos han sido muchos de los espectáculos celebrados en Florida Park, que vio cómo Uri Geller doblaba cucharas en televisión o cómo debutaba Miguel Bosé en 1977. Con motivo del 50 aniversario de la cantante Alaska, celebrado este año, el marido de ésta Mario Vaquerizo, declaraba a ABC: “Es la mejor sala de fiestas que ha habido y estamos perdiendo ese tipo de recintos”.