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España

Génova ningunea a Ignacio González en la Convención con una ponencia de 'segunda'

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y el 'dimitido' consejero de Sanidad, Javier Fernández Lasquetty.

El Ágora de diálogo, como le llaman los organizadores, o la agenda de debates entre ministros, presidentes autonómicos, barones y portavoces parlamentarios que ha preparado Génova para la Convención Nacional, que arranca mañana en Valladolid, no sólo sobresale por la ausencia --por iniciativa propia-- de Jaime Mayor Oreja, líder del Grupo Popular en la Eurocámara y todavía miembro del Comité de Dirección del PP. Tras los últimos retoques, el programa oficial, consultado por Vozpópuli, indica que el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, formará parte de la ponencia Valor del parlamento, junto al portavoz en el Congreso de los Diputados, Alfonso Alonso, y el presidente del PP navarro, Enrique Martín. De hecho, en el planning elaborado por Génova aparece en este orden: Alonso, Martín y en última instancia, González. El coloquio estará moderado por la diputada Julieta de Micheo, exjefa de gabinete del exministro Federico Trillo.

Este cartel descafeinado choca con el trato que recibe el resto de jefes de Ejecutivos autonómicos, ya que todos van acompañados en sus respectivos seminarios del renombre de un ministro (en principio, acude el Consejo de Ministros en su totalidad, salvo el titular de Defensa, Pedro Morenés).  El hecho de que Ignacio González sea relegado a una ponencia de segunda da argumentos a quienes dentro del partido, en privado, se muestran convencidos de que el presidente madrileño está de salida y no será el candidato del PP al Gobierno regional en las próximas elecciones de 2015.

Aunque la agenda ha sido diseñada por la dirección del PP con anterioridad al revés judicial recibido por González el pasado lunes y que ha provocado la paralización del proceso de privatización de seis hospitales públicos inaugurados en 2008, la figura del presidente madrileño ya se encontraba en una complicada situación. Sobre todo, a consecuencia del fracaso del proyecto Eurovegas (también integró la delegación que perdió los Juegos Olímpicos de 2020) y de una cuestión que le salpica en primera persona, las supuestas irregularidades en la compraventa de un ático de lujo de su propiedad en Marbella. Algo que estaría ligado, como ha informado Vozpópuli, a presuntas corruptelas en la gestión de la publicidad de Telemadrid, la televisión pública madrileña. 

El hecho de que Ignacio González sea relegado a un coloquio menor da argumentos a quienes dentro del partido, en privado, se muestran convencidos de que el presidente madrileño está de salida

Asimismo, sus rifirrafes con el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, han sido constantes y en más de una ocasión han rozado la descortesía. Por ejemplo, el pasado diciembre, cuando González criticó la reforma de la financiación autonómica que el Gobierno está haciendo a escondidas y el maltrato fiscal a su región, Montoro le espetó: "El presidente de la Comunidad de Madrid cree que en el Ministerio de Hacienda está la ventanilla para que le hagamos candidato, y no es así".

Por contra, su predecesora en el Gobierno madrileño, Esperanza Aguirre, ahora en las quinielas para ser alcaldesa de la capital, ha sido encuadrada en una de las mesas con mayor tirón, la que conformará junto al ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, bajo el título España competitiva. Aguirre ha sido correspondida así por Génova, pese a ser una de las voces internas más críticas con la gestión del Gobierno. En los últimos comités ejecutivos nacionales del PP, la líder de los populares madrileños ha tenido sonadas intervenciones en defensa de las víctimas del terrorismo. Ha cuestionado, en presencia de Mariano Rajoy, que el Gobierno no cesara antes de la polémica sentencia al juez español de Estrasburgo que tumbó la doctrina Parot o que permitiese el acto de sesenta expresos etarras en Durango. También ha venido reclamando abiertamente al Ejecutivo una rebaja de impuestos, principalmente del IRPF.

El desglose de los coloquios

El Ágora de diálogo comenzará mañana por la tarde con la ponencia España plural, donde participarán el portavoz en el Senado, José Manuel Barreiro, la líder del PP vasco, Arantza Quiroga, y el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas. Le seguirán las mesas Reforma laboral, con la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y el presidente de Cantabria, Ignacio de Diego; y Una nación segura, con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y la líder del PP asturiano, Mercedes Fernández. Será el seminario de González el que ponga el cierre a la jornada.

Ya el sábado, la mañana se abrirá con el foro Vocación reformista, donde debatirán la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, con más de un pie en las listas para las europeas. Lo moderará el secretario general de los populares vascos, Iñaki Oyarzábal. A continuación, se desarrollará la mesa España vertebrada, con la ministra de Fomento, Ana Pastor, y la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi. Su homólogo en Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y la ministra Ana Mato dialogarán en Sanidad para todos.

Acto seguido, tendrá lugar la charla Fuertes en Europa, con la participación del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, y el presidente riojano, Pedro Sanz. Después vendrá el foro Sector público y crecimiento económico, con Montoro y la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho.  Por la tarde, intervendrán De Guindos y Aguirre, y posteriormente en el coloquio La fuerza de la Marca España, hará lo propio el titular de Exteriores, José Manuel García-Margallo, y el jefe del Gobierno extremeño, José Antonio Monago.

La reforma de la Justicia, con Alberto Ruiz-Gallardón, y el presidente del PP andaluz, José Ignacio Zoido, dará paso a las mesas España productiva, con el ministro de Industria, José Manuel Soria, y el presidente valenciano, Alberto Fabra, y Educación para todos, con el titular de Educación, José Ignacio Wert y el jefe del Ejecutivo balear, José Ramón Bauzá, que cerrará el ágora.

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