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España

El CIS ratifica la caída del PSOE, el ascenso de Podemos y que el PP volvería a ganar las elecciones

Estimación e intención de voto según el barómetro del CIS correspondiente a enero

Podemos obtendría, si se celebrasen hoy elecciones, un 23,9% de los sufragios y se situaría en la segunda posición por delante del PSOE, con un 22,2%, mientras en el primer puesto en estimación de voto se mantiene el PP, con un 27,3%, según el barómetro que el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha hecho público este miércoles.

El barómetro, realizado entre el 2 y el 12 del pasado mes de enero, consolida la caída del PSOE, que pierde 1,7 puntos desde el anterior sondeo con intención de voto, publicado en octubre, cuando se mantenía en el segundo puesto con un 23,9 por ciento de los votos, mientras el PP conserva la primera posición, aunque pasa de 27,5 al 27,3 en esta última encuesta.

No obstante, ya en los dos anteriores sondeos Podemos era la primera fuerza política en voto directo por delante de PSOE y PP, situación que se mantiene en el sondeo de enero, en el que el partido de Pablo Iglesias es citado por un 19,3 por ciento, seguido del Partido Popular, con el 12,9 (1,2 más que en octubre), y el PSOE, con un 12,4, que pierde 1,9 puntos.

En el voto directo se amplía la brecha entre Podemos y los dos principales partidos del país, ya que adelanta al PP en 6,4 puntos y al PSOE en 6,9. Por el contrario, según el Centro de Investigaciones Sociológicas, otras fuerzas que en anteriores encuestas habían sufrido una importante perdida de apoyos recuperan algo de respaldo en enero.

Casi un 21% de ciudadanos reconoce que no sabe qué votaría

Es el caso de Izquierda Unida o Unión, Progreso y Democracia (UPyD), que pasan de un 4,8 a un 5,2 (IU), y de un 4,1 a un 4,6, el partido de Rosa Díez. Otra importante subida es la que consigue el partido Ciudadanos de Albert Rivera, que pasa del 2,1 de la encuesta de octubre a 3,1 por ciento en enero.

Justo el caso inverso es el de CiU, que pierde ocho décimas y se queda en un 3 por ciento en la estimación de voto del CIS. Importante caída también de Esquerra Republicana, que pasa del 2,3 por ciento de octubre a un 1,6 en enero, y de Compromís, que pierde casi la mitad de sus apoyos y se queda en un 0,6 por ciento.

En el ránking del CIS, otras fuerzas políticas más pequeñas experimentan leves variaciones, como el PNV, que pasa del 1 por ciento al 0,7; el BNG, de 0,4 a 0,5; Coalición Canaria, del 0,3 al 0,5, o Amaiur, que sube una décima y se queda en un 1 por ciento.

Geroa Bai, que en la anterior encuesta no obtenía representación según el CIS, logra en enero un 0,2 por ciento, adelantando a UPN y a Foro Asturias (0,0 y 0,1, respectivamente). Siguen siendo muchos (un 20,8 por ciento) los ciudadanos que reconocen que no saben que votarían y un 13,6 por ciento dice que se abstendrá, 2,1 puntos menos que en octubre.

Citas electorales

El CIS ha hecho público su barómetro de enero, el primero de un año plagado de citas electorales, a menos de dos meses de los comicios en Andalucía y con la incógnita de la evolución de Podemos. El trabajo de campo de la encuesta se realizó hacia mediados de enero, antes de la convocatoria de elecciones en Andalucía o de la manifestación de Podemos del pasado sábado en Madrid. También fue previo a la Convención Nacional del PP de los pasados 23, 24 y 25 de enero y a la Conferencia Autonómica celebrada por el PSOE el pasado fin de semana en Valencia.

En Cataluña, CiU pierde ocho décimas mientras ERC cae al 1,6% respecto al 2,3 anterior

Ya en la encuesta de octubre, el CIS ratificaba el tercer puesto de Podemos y ponía cerco al tradicional bipartidismo encarnado por el PP y el PSOE, partidos a los que la formación de Pablo Iglesias incluso adelantaba en intención directa de voto. El PP se quedaba en un 27,5% en estimación de voto, mientras que el PSOE obtenía el 23,9%, a muy poca distancia del partido de Pablo Iglesias, que llegaba al 22,5%. En intención de voto directo, sin la estimación que realiza el CIS, un 17,6% de los encuestados dijo que votaría a Podemos frente al 14,3% que afirmó que optaría por el PSOE y un 11,7% que admitió que daría su voto al PP.

El otro partido más afectado a priori por el ascenso de Podemos era Izquierda Unida que, aunque conservó su cuarto puesto en octubre, perdió la mitad de los apoyos que tenía en julio y pasó del 8,2% en estimación de voto al 4,8%. UPyD mantuvo su quinto puesto, pero también cayó del 5,9% al 4,1%.

El PP, preocupado por el PSOE

El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha expresado la preocupación de su partido ante la fragmentación de la izquierda y el hecho de que el PSOE haya dejado de ser el primer partido referente de la izquierda. "Eso nos preocupa", ha dicho en rueda de prensa en el Congreso Hernando tras conocer los datos del CIS.

El portavoz 'popular' ha destacado además que el PP siempre ha creído en la centralidad del PSOE y en su papel y colaboración en toda la historia de la democracia. Respecto a la posición del PP, que se mantiene en el CIS como primer partido en estimación de voto con un 27,3 por ciento, Hernando ha considerado que "después de años de enorme desgaste seguir siendo la primera fuerza es positivo".

"Desconfianza por la cocina"

El portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, ha manifestado su "desconfianza por la cocina" de la encuesta del CIS, porque coincide -ha dicho- con la "estrategia del PP de ningunear al único partido que le puede sustituir en el Gobierno" y ha descartado que se pueda cumplir el escenario que dibuja esa encuesta y ha añadido que no se la cree "para nada".

El PSOE manifiesta su "desconfianza por la cocina" del CIS y dice no creérsela "para nada"

En ese sentido, ha argumentado que en los últimos meses se han conocido encuestas que sitúan al PSOE como segunda e incluso como primera fuerza política y "qué casualidad" -ha apuntado- que sea la del CIS la que coloca a los socialistas como tercer partido en estimación de voto. Una "cocina que no huele muy bien", ha agregado el portavoz socialista, convencido de que coincide "sospechosamente" con la estrategia del PP de "ningunear a su gran adversario y a su gran alternativa" y de "confrontar directamente" con otra fuerza política cuya verdadera estimación de voto no se puede medir por carecer de referencias del pasado.

Ha considerado "prematuro" interpretar que las próximas elecciones terminarán con el bipartidismo y ha recalcado que el "gran adversario" de los socialistas sigue siendo el PP.

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