Quantcast

España

El Rey no confirmará su presencia en el Supremo hasta saber el futuro de Dívar

Los reyes con el presidente del CGPJ, Carlos Dívar, en una imagen de archivo.

Carlos Dívar está dispuesto a resistir hasta el lunes para hacerse esa foto. A la Casa Real, sin embargo, no le hace tanta gracia ver esa imagen. La presencia del rey don Juan Carlos en el acto central de conmemoración del Bicentenario del Tribunal Supremo del próximo lunes en Madrid se ha convertido en el último campo de batalla del escándalo que rodea al todavía presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). De hecho, las maniobras realizadas por Dívar el pasado miércoles para retrasar hasta después de estos fastos el pleno extraordinario que debe decidir su futuro tenían como principal objetivo, precisamente, asegurarse su presencia en el mismo. "Quiere convertir ese acto protocolario en uno de reafirmación a su figura con el rey como notario", denunciaba ayer a este diario un vocal del Consejo.

En principio, la presencia del monarca estaba confirmada al menos desde el pasado lunes, según una nota de prensa que envió ese día la oficina de comunicación del alto tribunal. En ella, a la vez que se pedía a los periodistas interesados en asistir al mismo que se acreditasen, se afirmaba en su primer párrafo que "su Majestad El Rey de España presidirá en el Salón de Plenos del Tribunal Supremo el acto institucional conmemorativo del Bicentenario de este Tribunal". Una seguridad que no reflejaba, por ejemplo, al referirse a los otros protagonistas del acto, "los presidentes de las Cortes Supremas Iberoamericanas", de los que únicamente se aseguraba que "están invitados".

Un vocal del consejo critica que Dívar pretende convertir el acto en "una reafirmación de su figura con el rey como notario"

Sin embargo, portavoces oficiales de la Casa Real insistían ayer por la tarde a este diario que aún no era segura la presencia del rey en estos fastos y que, de hecho, hasta este viernes al mediodía "o tal vez por la tarde" no podrían confirmarla. Dicho portavoz, que negaba que esta falta de concreción sobre la asistencia o no del soberano a dicho acto estuviera motivada por la posible presencia de Dívar en el mismo, se escudaba en que, por costumbre, la Casa Real no suele facilitar la agenda de los miembros de la familia real con más de 48 ó 72 horas de antelación. Ayer, la página web de la institución sólo recogía actos previstos para este viernes, en concreto uno de la infanta Elena y otro del príncipe Felipe.

Pese a ello, fuentes del CGPJ muestran desde hace varios días su convencimiento de que la presencia o no del rey en dichos actos está ligado a lo que ocurra en las próximas horas con su presidente. Si dimite, el rey estaría sin problemas en los mismos junto al sustituto de Dívar, que o bien sería su vicepresidente en el Consejo, Fernando de Rosa, o bien el presidente de sala más antiguo del Supremo, en este caso Juan Antonio Xiol. Sin embargo, sí se aferrase al cargo y lograra evitar que prosperase la remoción que pide uno de los vocales, José Antonio Gómez Benítez, estas fuentes creen que la Casa Real anularía la asistencia del soberano argumentando cualquier excusa para evitar una fotografía junto a una figura tan desprestigiada ante la opinión pública.

De hecho, las presiones de las últimas horas sobre Dívar para que dimita (incluso antes de que se celebre el pleno extraordinario en el que le van a instar a ello) han continuado a lo largo de las últimas horas. Como informó ayer Vozpópuli, varios de los consejeros considerados afines a él que en las últimas semanas siempre se habían mostrado partidarios de que continuara en el cargo, han cambiado de posición en los últimos días y ya le han transmitido la necesidad de que abandone su puesto cuanto antes para preservar la institución.

A la espera de conocer los apoyos

Pese a ello, a última hora de ayer, los miembros del Consejo consultados por este diario no se atrevían a aventurar qué hará finalmente el próximo sábado el presidente del órgano de gobierno de los jueces. "Dependerá de los apoyos que crea conservar", señalaba uno de los vocales, que prefiere mantenerse en el anonimato. No obstante, en medios jurídicos se daba desde el miércoles por seguro que el presidente del CGPJ ya tiene asumido que debe abandonar su cargo y lo único que no sabe es cuándo y cómo. "Sigue convencido de que una dimisión es un reconocimiento de culpa, y él insiste en que en sus gastos de viaje no hay ninguna irregularidad", reconoce una de estas fuentes.

Un convencimiento en el que se ha reafirmado tras la decisión del miércoles del Tribunal Supremo de archivar la querella que por malversación de caudales público había presentado un despacho de abogados de Murcia y la defensa que de él ha hecho la Fiscalía tanto en ésta como en una denuncia anterior. Un fallo del alto tribunal que, lejos de apaciguar el enfrentamiento en el CGPJ, lo ha reavivado, ya que cuatro de los 15 magistrados que participaron en el pleno sí eran partidarios de investigar los polémicos viajes de fin de semana de Dívar. El contenido de los votos particulares de éstos, que se conocerán en las próximas horas, pueden ser, de hecho, la puntilla para Dívar. Mientras, la Casa Real permanece a la espera.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.